Reflexiones Semanales

La casa construida sobre una ambiciosa jactancia se derrumba siempre. Por su ambición y hambre de poder y atesorar posesiones, Atalía persiguió a todos los descendientes de Joram pero no pudo asesinar a Joas que fue protegido por el sacerdote Yehoyadá.  En Atalía se ve un ejemplo de las verdad de las palabras de Jesús de que las polillas y el óxido corroen la fuerza y la seguridad de tales falsas construcciones. Otras palabras de Jesús nos traen  consejos más prácticos. Él nos aconseja tener un "buen ojo", lleno de luz y buenos deseos para poder ver la bondad y la luz en las acciones y corazones de los demás. En lugar de enojarse por sus fallas e idiosincrasias, nuestro "buen ojo" debería reconocer el lado bueno de ellos. Debemos elogiarlos por sus virtudes, no condenarlos por sus vicios, y no imitarlos en alardear o jactarse. Pero si debemos jactarnos, que se trate de la gracia de Dios que nos ayuda en lo que sean nuestras debilidades, fracasos o momentos de

Bernabé fue un colaborador cercano de Pablo, hasta que tuvieron una disputa importante y se separaron (Hechos 15:39). Bernabé fue uno de los miembros más amables, defensores de la vida y la alegría de la Iglesia primitiva. Lucas lo elogia como "un hombre bueno, lleno del Espíritu Santo y de fe". Era un hombre de gran confianza de los apóstoles, compartió sus propiedades con los pobres, y se convirtió en la voz de apoyo del ex perseguidor, Saulo / Pablo, su opinión era aceptada como genuina y válida dentro de la comunidad cristiana en Jerusalén. En Hechos, se lo retrata con una personalidad desinteresada, confiable y alentadora que lo convirtió en un embajador ideal para la difusión del Evangelio. Esto lo convirtió en el enviado perfecto para apoyar a la creciente iglesia en Antioquía. Parece que Saulo/Pablo era demasiado directo al predicar la fe en las sinagogas a las que alguna vez perteneció. Por esta razón, los apóstoles lo enviaran de vuelta a su Tarso natal